La reflexión filosófica nos permite añadir años de vida, a través de la enseñanza de filósofos, aprenderemos acerca de conceptos tales como el tiempo, la felicidad, la muerte, la libertad, y el conocerse a sí mismo, para aplicarlos en nuestra existencia. La Filosofía nos ayuda a entender, o nos invita a preguntarnos sobre esas inquietudes que desde hace muchos años nos inquietan.

Debemos aprender a estar con nosotros mismos, y entender que cada quien elige con quién pasa su propio tiempo. Estar a solas te permite reflexionar para saber quién eres.

La vida siempre está corriendo, nunca para. Ninguno se ve favorecido por el tiempo, es igual para todos. Mientras vivimos, sigue su curso, sin parar. ¿Qué hacemos nosotros en nuestro propio tiempo, lo valoramos?

Muchas veces, nos afligimos por cosas que no han pasado y quizás nunca pasen. El miedo al dolor es una de las mayores causas de la infelicidad.

El filosofar brota de la raíz misma de lo humano: de nuestra necesidad de interpretarnos en términos de ultimidad.

El quietismo no es una opción. No es necesario tener esperanzas para obrar.

La libertad de uno, depende de la libertad de los otros; y viceversa. Si quiero mi libertad, también debo querer la libertad de los otros.

La Filosofía te da libertad para pensar.

Entender que la vida es un proceso de aprendizaje, siempre estamos en la búsqueda de nosotros mismos; también en permanente cambio. Tal vez no todos nos encontremos de la misma forma, pero sí podemos.