Un Sistema de Información (SI) es un conjunto de componentes interrelacionados que trabajan juntos para recopilar, procesar, almacenar y difundir información para apoyar la toma de decisiones. Además apoyan la coordinación, control, análisis y visualización de una organización.
Por otro lado, la tecnología TI describe cualquier tecnología que impulse o permita el almacenamiento, procesamiento y flujo de comunicación dentro de una organización. Todo lo relacionado con computadoras: software, redes, intranets, sitios web, servidores, bases de datos y telecomunicaciones queda bajo el paradigma de TI.
La mayoría de las empresas modernas dependen, en gran medida, de los sistemas para la gestión de sus operaciones y la toma de decisiones; desde el correo electrónico, hasta la administración de la base de datos y sitios web.
La información comienza como flujo de datos sin procesar, representan eventos que ocurren en organizaciones o en el entorno físico antes de que se hayan organizado en una forma que las personas puedan entender y usar. Son la materia prima para el procesamiento y se refieren a hechos, eventos y transacciones. Por lo tanto, el propósito de los SI es convertir los recursos en bruto en información útil que pueda utilizarse para tomar decisiones en una organización.
Por ejemplo, los hospitales tienen grandes bases de datos de pacientes para lograr un historial clínico eficiente. Las universidades cuentan con sistemas para el manejo del personal, alumnos, transacciones de pagos, así como redes en expansión para administrar el campus. Incluso una pequeña empresa dedicada a la comida con envíos a domicilio necesita un sistema de gestión y seguimiento de pedidos.
Si bien los Sistemas de Información pueden diferir en la forma en que se usan dentro de una organización, todos tienen los siguientes componentes:
Hardware: los sistemas utilizan hardware local como una computadora o servicios de Nube para su ejecución.
Software: estos son los programas utilizados para administración, procesamiento y análisis.
Bases de datos: los sistemas trabajan con recursos organizados en tablas y archivos.
Red: se deben conectar diferentes recursos entre sí, especialmente si muchas personas diferentes en una organización usan el mismo sistema.
Procedimientos: describen cómo se procesan y analizan los datos y recursos específicos para obtener las respuestas para las que está diseñado el sistema (“lógica del negocio”).