Dirigido a estudiantes y clínicos de Terapia Ocupacional o profesionales relacionados a fin de mejorar la atención clínica de las personas afectadas de deterioro cognitivo y demencia, prestándoles un tratamiento especializado en estimulación cognitiva que les ayude a retrasar el deterioro progresivo de su enfermedad y puedan ser funcionales el máximo tiempo posible.

Con esta técnica conseguimos que se retrase la institucionalización y la dependencia.

Cursando este curso básico los profesionales podrán marcarse unas directrices sobre la planificación del tratamiento en estimulación cognitiva y cómo aplicarlo en sus sesiones clínicas de una manera estandarizada.

En estadios leves de afectación es mucho más eficaz, incluso se puede aplicar en personas con parámetros de rendimiento cognitivo normal como prevención. A ciertas edades todas las personas tendrían que hacer ejercicios cognitivos diarios para garantizar que no se desarrollen este tipo de enfermedades neurodegenerativas. Más aún si han sido diagnosticados, el afectado y su entorno tienen que ser conscientes de la necesidad de recibir este tratamiento no farmacológico, que unido a su medicación actuará como freno continuo de sus alteraciones.

Tenemos que aplicar el tratamiento con dosis de sesiones semanales dependiendo de las necesidades de cada usuario, entre una y tres veces, establecer horarios flexibles, prestar atención domiciliaria u ofertar sesiones en centros accesibles a la comunidad.

Se necesitan muchos profesionales especializados en este campo, que puedan desarrollar este trabajo en los domicilios, centros públicos o privados. Aprender estas técnicas de estimulación cognitiva es una salida laboral y supone un futuro prometedor para los terapeutas ocupacionales y profesionales que se dediquen a prevenir y tratar el deterioro cognitivo y las demencias.